- La estructura gobierna la función. Si la estructura vive en armonía (músculos, huesos, órganos, glándulas, piel…) la enfermedad no debiera desarrollarse y si fuera así podría defenderse rápidamente.
- El cuerpo es una unidad. El cuerpo humano funciona como un todo, la suma de todos los aspectos del ser humano se traduciría a ese todo, cualquier incoherencia o alteración en uno de los planos del individuo puede repercutir en otros.
- La autocuración del cuerpo. Una situación sintomatológica de la persona se traduce fisiológicamente a todos los niveles funcionales del organismo en un estrés que puede o no ser restaurado con más o menos facilidad, ya que todo organismo posee los medios para restaurar la salud. Va a depender del acceso y la transmisión de información de todos los aspectos en relación con ese síntoma con su lazo neurológico, bioquímico y estructural. Y es en este momento en el que el Osteópata actúa para generar en el organismo respuestas fisiológicas adecuadas cuando este no es capaz de restaurar la salud.
- La ley de la arteria es suprema
“Buscar el motivo, quitar el obstáculo y dejar el remedio a la naturaleza, es decir, a la sangre, es ser Doctor”. A.T. STILL.
En el primer soplo de vida, a nivel embrionario, la estructura se organiza alrededor del Sistema vascular. Se entiende arteria respecto a lo que la sangre transporta aunque también se pueden entender al concepto de fluctuación de todos los líquidos del cuerpo (sangre arterial y venosa, linfa, líquido cefalorraquídeo, líquido intra y extracelular) y por lo tanto en los tejidos.
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